Texto: Sofia Fontanela / fotos: Cortesía OCESA
Este viernes 21 de junio el Lunario del Auditorio Nacional se llenó de «Pura Vida», nombre que le dieron al festival de música latinoamericana del pueblo para el pueblo, como lo mencionaron sus exponentes.
En este festival participaron bandas de México, Colombia, Ecuador y Guatemala: Solovino, Conjunto Tropidélico, La Mafiandina, Sara Curruchich y Nasa Histoires.
La banda mexicana Solovino interpretó sus temas más populares, entre ellos «Carmela” y “La vida da”; la banda que los siguió fue Conjunto Tropidélico con un show de luces psicodélicas al ritmo de canciones como “Macario” y “Lamento de cumbia”.
En punto de las 6pm Taki Amaru, líder de La Mafiandina, entró al escenario no solo para interpretar su característico rap Kichwa, sino para concientizar al público sobre la situación que vivimos como sociedad, como lo hace cada que pisa el escenario. Uno de los momentos de más energía durante su participación fue cuando compartió el siguiente mensaje:
“A los gobiernos asesinos, a todos los presidentes que creen que pueden hacer lo que quieren con nuestros territorios. A todos los pueblos que resisten a la minería. A nuevas formas de encontrarnos en nuestros espacios, en nuestras comunas. Vengo de un país totalmente explotado que lo quieren saquear cada vez más. ¡Arriba todos los pueblos en resistencia!”.
Además hizo saltar a todo el Lunario con éxitos como «Humanidad», «Warmi harari» y «Tukyarin».
Sin embargo, no fue la única banda que interpretó temas para protestar y dejar un sentimiento de esperanza, pues la guatemalteca Sara Curruchich, dedico uno de sus temas a las personas desaparecidas “Qach’alal”, acompañada de un discurso que tocó corazones:
“Esta canción es para la memoria de las y los desaparecidos, de las guerras, de la guerra en Guatemala, en México, en toda Latinoamérica, la de Palestina. Cantando también podemos dignificar y traer la memoria, seguir hablando de esto es hacer justicia”.
Para cerrar el festival, Nasa Histoires, la banda más esperada de la noche, interpretó temas como “Pasado”, “Cactus” y “Diente de león”.
Fue este momento del show en el que el ambiente se llenó de fiesta y hermandad entre el público, pues se repartieron flores entre ellos al ritmo de las canciones “Florecer contigo”, “Trébol”, “Bugambilia” y “Girasol”.
El Pura Vida fue un evento que unió al Ska, el Rap Kichwa, el rock y la música tradicional maya kaqchikel, para inspirar con un canto de esperanza a todo su público. Según las bandas participantes estamos en espera de una segunda edición, así como más espacios para la música Latinoamericana.