Texto: Itzel Anguiano / Fotos cortesía OCESA
El pasado 10 de octubre, la icónica banda de rock alternativo Camilo Séptimo se presentó en el legendario Teatro Metropólitan de la Ciudad de México, ofreciendo un concierto memorable que dejó una profunda impresión en los miles de fanáticos que llenaron el recinto. Con un setlist cargado de éxitos y una puesta en escena visualmente impactante, el grupo logró crear una atmósfera íntima y mágica, fusionando música, emoción y una conexión genuina con su público.
El espectáculo comenzó con una energía desbordante desde el primer acorde de la canción «Eres», tema que marcó el inicio de una velada inolvidable. La audiencia, completamente entregada desde el principio, coreó cada palabra mientras luces multicolores y visuales psicodélicos llenaban el escenario, transportando a los asistentes a una experiencia sensorial única. A lo largo de la noche, temas emblemáticos como “Vicio”, “No Confíes en Mí” y “Pulso” elevaron la emoción, convirtiendo el teatro en una masa vibrante de voces y aplausos.
Uno de los momentos más emotivos de la noche fue cuando la banda interpretó «Miénteme», una de sus baladas más queridas, bajo un ambiente tenue, iluminado por las luces de los celulares de los fans. El vocalista, Manuel Mendoza, se mostró visiblemente conmovido por la respuesta del público, agradeciendo en varias ocasiones el apoyo incondicional que han recibido a lo largo de los años. Cada canción fue acompañada por visuales cautivadoras que, en conjunto con la calidad sonora, ofrecieron una experiencia envolvente que fue mucho más allá de un simple concierto.
Camilo Séptimo, que ha sabido ganarse un lugar privilegiado en la escena musical mexicana con su fusión de rock, pop y sintetizadores, demostró en este concierto que su trayectoria sigue en ascenso. Su capacidad para reinventarse y para ofrecer espectáculos con una producción de alta calidad confirma que son una de las bandas más influyentes de la actualidad.
El cierre del show no pudo ser más espectacular. La banda despidió la noche con «Ser Humano», su hit más reciente, dejando al público con una mezcla de alegría, nostalgia y el deseo de seguir escuchándolos. Aplausos ensordecedores llenaron el teatro mientras Camilo Séptimo agradecía con una promesa: “Nos volveremos a ver muy pronto”.
En resumen, el concierto de Camilo Séptimo en el Teatro Metropólitan fue una celebración musical y visual que no solo reafirmó el talento indiscutible de la banda, sino que también consolidó su relación con un público que, canción tras canción, demuestra estar dispuesto a acompañarlos en cada paso de su carrera. Una noche para el recuerdo que quedará grabada en el corazón de todos los presentes.
