Texto: Odeth Espinosa (@sadsaturn1_) / Fotos: Cortesía OCESA
El jueves 30 de noviembre, el Foro Sol de la Ciudad de México se convirtió en el epicentro de la nostalgia y la euforia, cuando los fans de «Rebelde» se reunieron para presenciar el esperado regreso de la icónica banda RBD. El público, en su mayoría compuesto por personas de 30 a 40 años, no solo asistió al concierto, sino que lo vivió intensamente al llevar consigo el espíritu rebelde a través de caracterizaciones con el emblemático uniforme de la famosa telenovela.
Los asistentes no solo portaban con orgullo el distintivo sombrero rosa de Anahí, sino que también recibieron un vibrante obsequio en la entrada: un brazalete con luces que iluminaba el recinto en momentos clave de las canciones. Este detalle no solo resaltó la conexión entre el público y la música, sino que transformó el Foro Sol en un mar de luces en sincronía con los acordes de RBD.
El concierto, que se extendió por 2 horas y media continuas, fue una experiencia inolvidable. Los éxitos de inicio a fin resonaron en todo el recinto, transportando a los asistentes a una época llena de recuerdos y emociones. La interpretación de «Sálvame» fue un punto culminante, provocando lágrimas entre la multitud, ya que esta canción ha sido un himno de muchas generaciones a lo largo de los años.
En resumen, el reencuentro de RBD en el Foro Sol no solo fue un concierto, fue un viaje en el tiempo cargado de nostalgia y emociones compartidas. La conexión entre los fans y la banda, la atmósfera luminosa y la entrega en cada nota musical convirtieron este evento en un capítulo inolvidable para todos los que presenciaron el renacer de la esencia rebelde.